La higiene es primordial en todos los procedimientos de estética y en especial, los de manicura.
Como primera medida, casi siempre vas a tocar la piel de los clientes y es necesario que lo hagas con las manos limpias y con instrumentos limpios y esterilizados.
Cuando se trata de productos desechables, como cuchillas de afeitar, cuchillas para pedicura, guantes, mascarillas, los repuestos del torno y muchos otros, es necesario que los clientes vean que son nuevos. Trataremos de abrirlos delante de ellos.
También recomendamos lavarse las manos delante de los clientes: "Dame un minuto, me lavo las manos y estoy ya contigo".
Eso les da la seguridad de que tus manos están realmente limpias. Si no fuera así, podrían pensar que vienes de tocar otras manos u otros pies. Pero de esta manera, hacerlo delante de ellos, les da una garantía de higiene y profesionalidad.
Y por otro lado, recomendamos colocar alcohol (líquido o gel) en tus manos y luego en las manos de la clienta, como procedimiento inicial de todas las manicuras.
El alcohol elimina muchas bacterias y eso te garantiza que los clientes no van a adquirir alguna enfermedad por nuestra culpa, por ejemplo hongos.
Por último, en el caso de las pedicuras, al hacer la evaluación de los pies (tocar los pies por primera vez) es necesario que se haga con guantes. Luego de limpiarlos y prepararlos, y si no hay presencia de hongos, te puedes quitar los guantes para el masaje y después pintar.
Una buena higiene es garantía de un un buen servicio.
